Apnea del Sueño

Se denomina apnea del sueño al trastorno que padecen aquellas personas en las que se producen pausas respiratorias durante el sueño. Estas pausas pueden ser breves o largas y se pueden repetir en numerosas ocasiones a lo largo del sueño, dando lugar como consecuencia a somnolencia diurna y otras alteraciones en el organismo. Si las pausas respiratorias o apneas son muy frecuentes pueden dar lugar al síndrome de apnea-hipopnea del sueño (SAHS).

La apnea del sueño se asocia con un incremento en la mortalidad por enfermedades cardíacas, cerebrales y por un aumento del riesgo de accidentes de tráfico por la somnolencia producida.

Los factores de riesgo más importantes asociados son:

• Factores genéticos: Hay mayor riesgo de desarrollar un SAHS en las personas con antecedentes familiares.
• Los varones la padecen más.
• A mayor edad, mayor riesgo de padecer apnea del sueño.
• Dormir en decúbito supino (boca arriba) la favorece.
• Los sedantes, alcohol o relajantes musculares aumentan las pausas respiratorias.
• La obesidad o sobrepeso es uno de los factores más determinantes para el desarrollo del SAHS.
• La dificultad para el paso del aire en las vías respiratorias por pólipos, úvula (campanilla) grande pueden aumentar su aparición.

Para poder diagnosticar un síndrome de apnea-hipopnea del sueño se suele hacer por la clínica (pausas durante el sueño, ronquidos…) descrito por la pareja y por un estudio del sueño (polisomnografía).

En cuanto al tratamiento, se deben evitar:

• El sobrepeso y la obesidad
• Dormir boca arriba.
• Evitar el tabaco, alcohol, sedantes, relajantes…

En algunos casos es necesario utilizar una mascarilla durante el sueño, denominada CPAP, que puede ayudar, según el caso, a disminuir la obstrucción de las vías respiratorias.

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