A pesar que la artrosis sea considerada un proceso irreversible, y desde la Atención Primaria, el tratamiento más pautado sean los antiinflamatorios, analgésicos y el “reposo relativo”, vamos a dar una serie de consejos que pueden aliviar la calidad de vida de nuestros pacientes, antes de llegar, en los casos que fueran necesarios a la colocación de una prótesis.
ADVERTENCIA: No tomar antiinflamatorios (AINEs) de forma prolongada, sobre todo si tiene patología renal de base.
¿Cómo vivir con artrosis? Hay 2 formas:
o Como le habrán dicho, es importante reducir la obesidad y evitar, bajo todo concepto, el sedentarismo. Ambos están ligados a favorecer la evolución de la artrosis.
o Fortalecimiento y estiramientos de la musculatura vecina a la articulación afecta. Sin fortalecimiento muscular apropiado del músculo cuadriceps e isquiotibial, cada paso durante la marcha, provocará choque fémur-tibia directo y continuo, cuya repetición acelerará el proceso artrósico. Junto con ello, es imprescindible promover el estiramiento de la misma musculatura, pues una musculatura excesiva sin control, también somete a la articulación a mayor estrés (sobre todo del músculo cuádriceps, en relación con la artrosis de rodilla).
o Introducir la marcha (aunque exista leve dolor) y aumentar progresivamente la intensidad.
o Corregir la marcha (pisada). Sobre todo en operaciones previas de menisco, a partir del cual se modificó la pisada, y el continuo micro-traumatismo con el nuevo patrón de marcha, provoca la aparición o el empeoramiento del proceso artrósico. No dude en consultar el especialista en Podología de zona.
o En reagudizaciones del dolor, o artrosis muy evolucionadas, es conveniente el uso de soporte mecánico, tipo bastón simple, para reducir la presión en la articulación en cada pisada. RECORDAR: el bastón simple o muleta, siempre se utiliza con la mano contraria al miembro inferior lesionado. De modo que, si tenemos artrosis en la rodilla derecha, emplearemos el bastón en la mano izquierda, y se coordinarán de modo que, la pisada del pie derecho coincide con el apoyo del bastón.
o Hidratación y suplementos (condroitina, glucosamina, ácido hialurónico). Consulte siempre a su Médico de Atención Primaria, quien le prescibirá el más adecuado.
o Ejercicio en carga discontínua. (biclicleta, natación, máquina elíptica). Este tipo de ejercicios promueven la activación de la regeneración tejido articular, y la nutrición del mismo gracias a la movilización del líquido sinovial.
Como yo les digo siempre a mis pacientes: “Únicamente tenemos dos rodillas, imprescindibles para una vida erguida y funcional, démosle el cariño que se merecen, ellas nos permitieron conocer y trotar el mundo”.
Dr. Kramer R.
NC: 30/3009379
Fisioterapeuta y Residente MFyC.
Miembro del GT Medicina Basada en la Evidencia (SEMERGEN)
Revisado por el equipo médico de pacientessemergen.es